Vladimir Putin sólo firmará la paz con Ucrania, si se aceptan todos sus condiciones militares, geopolíticas y económicas. El líder ruso tiene un método para alcanzar sus objetivos tácticos y estratégicos que copió de Josef Stalin cuando negociaba con Estados Unidos la configuración del mundo tras la Segunda Guerra.

Ese método consiste en fijar una línea roja inamovible, presionar en todos los flancos y evitar la misericordia.

Donald Trump se siente más cómodo con la posición de Putin, tiene diferencias estratégicas con Europa y considera que Volodimir Zelensky debería aceptar las reglas de juego que se pretenden imponer desde la Cas Blanca y el Kremlin.

En este contexto, la paz entre Ucrania y Rusia es un objetivo geopolítico que tiene un final indescifrable. Zelenski no cederá el Dombas como exige Putin, y Europa no se plegará a la hoja de ruta que propone Estados Unidos.

Trump quiere un acuerdo de paz antes de la Navidad.

Sería un milagro.